Este proyecto se inició en el año 1923 y hasta que se construyó el Kavanagh era el edificio más alto de la ciudad. El ‘Barolo’ tiene cien metros de hormigón en la Avenida de Mayo, lo curioso fue que fue creado con el sólo fin de albergar en su interior los restos de Dante Alighieri, que descansa en Italia.
La obra fue ideada por Luis Barolo, de ahí su nombre, arquitectónicamente estuvo en manos de Mario Palanti. Ambos soñaban que este edificio fuera convertido en el mausoleo del famoso escritor, cosa que no pudo concretarse. Pero el homenaje se respira en su interior, viviendo en cada paso que se da la Divina Comedia.
La planta baja nos lleva al infierno, los pisos que siguen, el purgatorio y finalmente el paraíso. La cúpula del palacio se inspiró en un templo hindú y simboliza la unión entre Beatrice y Dante.
Encima de todo veremos un faro que simboliza la luz de Dios. En su momento, este faro podía verse desde Montevideo, ahora por los nuevos edificios es imposible lograrlo. En Montevideo hallaremos una obra melliza a esta, del mismo arquitecto, el Palacio Salvo.
Dentro de los techos abovedados se podrán leer inscripciones en latín.
El lugar cuenta con visitas guiadas de 40 minutos de duración, donde te contaran más detalladamente la historia de este magnífico Palacio.
Foto | Flickr - Lucy B